El Colegio Providencia de Linares abrió sus puertas al nuevo año académico con un emotivo acto de bienvenida, en el que se congregaron profesores, asistentes de educación y, sobre todo, las jóvenes estudiantes que llenan de vida y esperanza cada rincón de esta institución educativa.
La jornada dio inicio con una solemne oración matinal, en la que toda la comunidad educativa se unió en un momento de reflexión y espiritualidad para encomendar el nuevo año académico a la Providencia de Dios. Este gesto no solo marcó el inicio de un nuevo ciclo escolar, sino que también recordó la importancia de cultivar valores que van más allá de lo puramente académico, promoviendo así el desarrollo integral de cada estudiante.
Posteriormente, la señora Ema Benítez Valdivieso, directora del Colegio Providencia de Linares, dirigió unas palabras cargadas de inspiración y motivación para todos los presentes. En su discurso, destacó la importancia de la educación como herramienta transformadora y el compromiso de toda la comunidad educativa en la formación de estudiantes íntegras y solidarias.
Uno de los momentos más esperados fue la presentación de los profesores jefes de cada nivel académico. Con orgullo y dedicación, los docentes asumieron el compromiso de guiar y acompañar a sus estudiantes a lo largo de este nuevo año escolar, brindándoles el apoyo necesario para alcanzar sus metas y potenciar sus habilidades.
Posteriormente, como un gesto de bienvenida y acogida, se realizó la entrega de un presente a todas las estudiantes nuevas que se incorporan a nuestro establecimiento este año. Este pequeño detalle no solo buscó hacer sentir a las nuevas integrantes parte de la gran familia Providencia, sino que también simbolizó el inicio de una nueva etapa llena de oportunidades y aprendizajes.
El inicio de este año académico abre un nuevo capítulo en la historia de este colegio, donde profesores, asistentes de educación y estudiantes trabajarán juntos en la construcción de un futuro lleno de oportunidades y éxitos. Que este año escolar sea un camino de crecimiento y realización para todos los que forman parte de esta querida institución educativa, siempre al amparo de Dios Padre Providente y María Madre de Dolores.
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